-Ayer fui y volví de la estación por 40 rupias.- le contesté. -¿Alguno de vosotros me lleva por el mismo precio?- aproveché para preguntar al grupo de taxistas que se hallaban reunidos. Afortunadamente no tardó en aparecer un voluntario.
Le pregunté al primer taxista por que perdía negocio de aquella manera tan absurda y fue entonces cuando me contestó la celebre frase: -Mi negocio es estafar a los turistas y me gusta-.
Así de contundente y directo me expuso su filosofía. -Muchos de ellos no preguntan el precio y saltan directos al vehículo, otros ni se inmutan cuando les pido 80 rupias o incluso más. Si tú quieres un precio local regatea con otro, yo sólo conduzco por 80 rupias a la estación.
Share
Pin
Tweet
Send
Share
Send